¿Maternidad perfecta? Lo que aprendí sobre soltar expectativas

¿Qué significa ser una mamá perfecta? Durante mucho tiempo, intenté seguir esa idea: tener una casa impecable, un bebé siempre feliz y ser esa mamá que puede con todo. Pero, con el tiempo, descubrí que la maternidad perfecta no existe. Más bien, la maternidad perfecta se trata de amor, resiliencia y, sobre todo, de aprender a soltar.
La presión de ser perfecta Vivimos en un mundo lleno de expectativas irreales. Las redes sociales están llenas de imágenes de familias que parecen sacadas de cuentos, con niños perfectamente vestidos y mamás que parecen nunca cansarse. A eso se suman los comentarios bien intencionados pero abrumadores de amigos y familiares: “¿Todavía lo cargas tanto?”, “¿Por qué no le das X alimento?”, “Cuando yo era mamá, hacía esto y aquello”.
Todas esas voces pueden hacerte sentir que nunca estás haciendo lo suficiente para lograr la maternidad perfecta. Pero la verdad es que no hay un manual universal para ser mamá. Cada niño, cada mamá y cada familia es única.
“La idealización de la maternidad nos lleva a crear expectativas poco realistas, que a menudo resultan en madres frustradas y culpables por no alcanzar un estándar inalcanzable.”
– María Espinosa del Olmo
Lo que aprendí sobre soltar expectativas
1. La maternidad no tiene guion Al principio, traté de seguir todos los consejos al pie de la letra. Desde los libros de crianza hasta los “tips” que veía en Internet. Pero pronto me di cuenta de que no todo funciona para todos. Cada bebé tiene su propio ritmo, y como mamá, aprendí a escuchar más a mi instinto que a las opiniones externas. De esta manera, la maternidad se convirtió en algo más auténtico y menos una búsqueda de la perfección.
2. Equivocarme también es parte del aprendizaje Hubo días en los que lloré porque sentía que había fallado: una rabieta que no supe manejar, una comida que no quiso probar. Pero en esos momentos entendí que los errores son inevitables y que, más allá de mis fallas, lo que importa es el amor que les doy a mis hijos. Así es como la maternidad perfecta realmente debería ser, llena de amor y aprendizaje.
3. Celebrar las pequeñas victorias La perfección puede ser inalcanzable, pero las pequeñas victorias son reales. Ya sea lograr que mi bebé duerma una noche completa, encontrar cinco minutos para tomar un café caliente o simplemente disfrutar de una risa compartida. Esas pequeñas cosas son las que hacen que cada día valga la pena.

4. Cuidarme también importa Por mucho tiempo pensé que ser una buena mamá significaba darlo todo por mis hijos. Pero aprendí que no puedo dar lo mejor de mí si no me cuido también. Tomarme un tiempo para leer, descansar o simplemente respirar profundamente no me hace menos mamá; me hace una mamá más fuerte y equilibrada.
5. Liberar también a mis hijos de la perfección Cuando dejé de presionarme por ser perfecta, también liberé a mis hijos de esa expectativa. Aprendí a aceptar que ellos también tienen días difíciles y que no siempre se comportarán “como deberían”. Eso nos ha permitido disfrutar más de nuestro tiempo juntos, sin tanto estrés.
6. Reconocer el cansancio y las emociones reales Hay días en los que la paciencia se acaba, en los que el cansancio se siente como una carga demasiado pesada. Y está bien. Ser mamá significa dar mucho de ti misma, pero también aceptar que somos humanas. Perder la paciencia no nos hace malas madres; nos hace reales. Lo importante es aprender a pedir disculpas, reconectar y seguir adelante con amor.
7. Cambiar la forma de ver a otras mamás Desde que me convertí en mamá, mi percepción hacia otras mamás cambió por completo. Ahora veo a una mujer que dio todo de sí misma para traer a un hijo al mundo, que enfrenta noches sin descanso, dudas constantes y preocupaciones interminables, pero que sigue adelante con fuerza. Juzgar menos y empatizar más me ha permitido crecer como persona.

“No hay manera de ser una madre perfecta, pero sí un millón de maneras de ser una buena madre.” – Jill Churchill
Consejos prácticos para soltar expectativas
- Rodéate de apoyo real: Encuentra comunidades de mamás que entiendan tus luchas y compartan tus valores. Hablar con otras mamás que también están soltando expectativas puede ser sanador.
- Acepta el caos: No pasa nada si tu casa no está impecable. La vida con niños es desordenada, y eso también es hermoso.
- Desconéctate de la comparación: Recuerda que las redes sociales son una versión editada de la vida real. No compares tu día a día con los momentos más perfectos de otros.
- Define tus propias prioridades: Pregúntate qué es lo realmente importante para ti y tu familia. Concéntrate en eso y suelta el resto.
“La crianza no se mide por la cantidad de cosas que haces por tus hijos, sino por la calidad del amor que les ofreces.” – Dr. Shefali Tsabary, autora de ‘The Conscious Parent’

Ser mamá no se trata de ser perfecta, se trata de ser presente. La maternidad perfecta no es más que una ilusión; tus hijos no necesitan a una mamá impecable, necesitan a una mamá que los ame tal como son, incluso en los días más desafiantes. ¡Tú ya eres suficiente!
Y tú, ¿qué expectativas has aprendido a soltar en tu maternidad? Me encantaría leer tu historia en los comentarios. Juntas, podemos construir una maternidad más real y llena de amor.
6 Comments
Clau · December 14, 2024 at 1:26 am
Sobre todo el momento de la comida es muy complejo, desde la presión de preparar muchas variedades , y distintas formas, hasta el tiempo invertido en cada comida al día para que coma solo un poco. La resiliencia y la paciencia es clave para navegar esos momentos. Pero lo mejor, es que todas esas etapas pasan. Y lo malo no se queda, solo los recuerdos buenos.
Danelys · December 14, 2024 at 2:28 am
No soy madre pero definitivamente estos consejos me servirán de mucho para cuando decida serlo sobretodo porque ser mamá es un viaje único de amor, aprendizaje y entrega.
Ser mamá también implica crecer como persona, adaptarse a los cambios y aceptar que no siempre habrá respuestas perfectas, pero siempre habrá amor incondicional. Es una experiencia llena de retos, alegrías y, sobre todo, significado.
Herica Camila · December 14, 2024 at 4:01 am
Excelentes estos consejos tanto para las que ya son madres como para las futuras…nos hace ver la realidad de la maternidad y prepararnos para ese momento sin caer en falsas expectativas…Espero seguir leyendo sobre este tema, me encanta su contenido.
Ilianis · December 14, 2024 at 7:16 pm
No soy mamà aùn pero m encantaron sus consejos….muy reales ….Ser madre es un acto de amor incondicional, una experiencia ùnica en cada una d sus etapas.
Meivys Cruz · December 14, 2024 at 8:12 pm
Excelentes consejos , yo soy mamá y me identifico con cada letra escrita aqui, aveces pensamos que no podemos, que lo estamos haciendo mal, lloramos nos cansamos pero luego esta su sonrisa y su carita mirandote y diciendo “mamá te quiero mucho eres mi tesoro” palabras que se quedan siempre en el porque a cada segundo se lo estas diciendo y es eso lo que te da fuerzas para salir adelante y para decirte lo estás haciendo muy bien. Ser madre no es nada facil y te das cuenta que definitivamente no hay respuestas perfectas pero si es un viaje lleno de amor,dedicación y aprendizaje que te hace ser mejor persona y mejor MAMÁ. Gracias por compartir este block esta muy interesante,,,, me encantó
Lilian Rosa · December 15, 2024 at 9:20 pm
En este artículo refleja la realidad que vivimos casi todas las madres.Yo fui mamá hace 33años con muy poca experiencia y guiandome por mis padres y abuelas.Dandome cuenta que muchas cosas fueron incorrectas como tratar d llevas a un bebé y una casa arreglada a la ves ,ya que no lo conseguía.Lo más importante es estar al lado d nuestros hijos apoyándolos y cuidando los ,lo demás debe dejarse y no recriminar nos por no poder con todo.
Comments are closed.